Una de las asignaturas pendientes de las empresas españolas es sin duda la productividad. Si queremos mejorar la productividad de nuestro negocio, hay varios aspectos que debemos plantearnos y que no siempre resultan muy intuitivos.
¿Cómo saber si mi empresa es productiva o no?
Muchas veces, la razón por la que en una determinada área de nuestra organización la productividad es francamente mejorable es la falta de mecanismos que permitan automatizar las tareas más simples. Por ejemplo, un software de gestión documental permitiría automatizar la gestión de documentos, reduciendo costes en impresión de papel y facilitando la coordinación entre empleados y departamentos.
Para que los miembros de la organización trabajen de forma productiva, lo primero y prioritario es, por tanto, disponer de las herramientas necesarias para medir su productividad.
Existen herramientas de recursos humanos que permiten el control de horas trabajadas, creación de partes de trabajo y otra serie de documentos que te ayuden a medir la productividad global de tu empresa, la productividad por departamento y la productividad por trabajador.
Qué hacer para mejorar la productividad de tu empresa
En base a estas mejoras y herramientas IT, se podría a continuación desarrollar una auditoría de recursos humanos, o acudir a un consultor para analizar los procesos de trabajo de cada área de la empresa, ver cómo pueden mejorarse y trazar una estrategia global que ayude a mejorar la productividad en las áreas que plantean mayores desafíos.
En este sentido, es muy importante desarrollar una buena comunicación interna y preparar a la plantilla para los cambios de los procesos que se vayan a llevar a cabo. A veces también será necesario implementar programas de formación que ayuden a preparar a los empleados para desarrollar una determinada tarea, o bien fomentar un mejor clima laboral o una mayor competencia.
No olvidemos tampoco la estrecha relación que hay entre productividad y gestión del talento humano. Un equipo de trabajo motivado tenderá a trabajar de forma más productiva. Asimismo, es importante facilitar los canales de comunicación para que los empleados y miembros de la organización puedan comunicar sus inquietudes e ideas mejora.
Aspectos que deberán ser evaluados y analizados, ya que muchas veces en la escucha de los responsables de cada área es donde se encuentra el quid de la cuestión para mejorar los procesos internos de trabajo.